Cargando contenido

Quintana, conforme pese a dar un paso atrás

El ciclista de Boyacá se quedó a 21 segundos de caerse de podio.

El colombiano Nairo Quintana divisará este domingo, domingo, el Arco del Triunfo de París desde un escalón del podio del Tour más bajo que en sus dos anteriores participaciones, pero se mostró satisfecho porque conservó un tercer puesto que sus condiciones físicas hacían peligrar.

El ciclista de Boyacá se quedó a 21 segundos de caerse de podio, pero su principal rival, el británico Adam Yates, de 23 años, ni siquiera se lo disputó en la última etapa de montaña.

Y eso que Quintana había revelado la víspera que su cuerpo andaba mal y que había pensado incluso en retirarse.

Sin dar pistas sobre la naturaleza de su enfermedad, el jefe de filas del Movistar pareció satisfecho con el botín logrado: su tercer puesto, la clasificación por equipos y la victoria de etapa conseguida por su compañero Ion Izaguirre.

"Estoy muy contento, tengo bastante efectividad, he corrido tres Tour y tengo tres podios (...) pese a las dificultades que tuve", indicó el ciclista de 26 años, que insistió en que tiene tiempo para conquistar el Tour en el futuro.

El colombiano quiso borrar el pesimismo que reinaba en su entorno en los últimos días, en los que una extraña alergia le impidió pelear por el "sueño amarillo".

"El balance es positivo. Veníamos con un objetivo más grande y ambicioso, pero tenemos años para seguir probando. Un podio en un Tour es importante, es la carrera más importante que hay, estoy muy contento", comentó.

Quintana volvió a estrellarse contra el británico Chris Froome, el único ciclista que hasta este año le había aventajado en el Tour.

En 2013, el colombiano escaló hasta la segunda posición pese a que acudía al Tour como segundo hombre del equipo, por detrás del español Alejandro Valverde.

Al año siguiente, el Movistar le obligó a renunciar a la ronda gala en favor del Giro de Italia, donde sumó la única 'grande' que figura en su palmarés.

El año pasado, ya como jefe de filas del equipo, perdió tiempo en los abanicos de la primera semana y su remontada en el tramo final no fue suficiente para desbancar a Froome.

"Es un rival muy fuerte. Me ha tocado luchar bastante contra él y seguramente en todos estos años próximos seguiremos ahí", indicó el colombiano, que auguró que mantendrá con el británico uno de los duelos que han hecho grande el ciclismo.

Pero, por el momento, Quintana no parece haber estado en disposición de limar el poderío del británico ni de la armada del Sky.

En esta edición, además, ha aparecido más lejos que nunca de su rival, incapaz de ponerle en dificultades, resignado a seguir su rueda mientras pudo y a limitar las pérdidas cuando Froome pasó al ataque.

El Quintana que se esperaba ofensivo en la última semana fue un ciclista timorato. El Tour de Francia de 2016 no dejará en la retina ningún ataque de uno de los ciclistas que han labrado su reputación sobre la ofensiva.

Frente a eso, el colombiano prefirió sumar los pequeños triunfos colectivos para ocultar su fracaso individual.

Quintana subirá dos veces al podio de París. Una, al tercer escalón de la general y otra acompañado del resto de los componentes del Movistar.

Insuficiente para acabar con el mal sabor de boca que dejó su incapacidad para pelearle el primer puesto a Froome.

El británico, que se permitió incluso el lujo de proclamar que el Sky es el mejor equipo de este Tour, gozó de una escuadra totalmente dedicada a su causa que le llevará de amarillo hasta París por tercera vez.

Quintana tendrá que conformarse con celebrar pequeños objetivos a la espera de que algún día llegue el "sueño amarillo".

En esta nota